THE JOURNALIST ASKS

En los últimos días se conoció una serie amenazas por parte de los grupos alzados en armas en esta región del país. Era nada más y nada menos la petición de guerrilleros de las FARC en la cual le solicitaba a siete alcaldes renunciar, o de lo contrario serían declarados objetivo militar. Los alcaldes junto con varios concejales presentaron su carta de renuncia ante el Gobernador del departamento Luis Miguel Morelli; el gobernador no recibió la renuncia y esto fue lo que declaro a algunos medios de comunicación nacional y regional.

"No vamos a aceptar la renuncia a los alcaldes porque nosotros, como gobierno vamos a garantizar la seguridad de cada uno de los mandatarios de esas zonas".

De inmediato se conoció que a los municipios donde los alcaldes desempeñan sus funciones, se desplazó un grupo de militares que garantizarán la seguridad. El área de la que hablamos es la provincia de Ocaña.

Pero los alcaldes no estuvieron muy convencidos de los anuncios hechos por Morellí y reiteraron que no continuarán gobernando bajo esa serie de amenazas.

Algo paradogico a este hecho, es que desde la secretaría Juridica de la Gobernación, el jefe de ese despacho señaló que las renuncias no pueden ser aceptadas porque no fue la forma más apropiada para presentar la ausencia del cargo. Recordó Armando Quintero, secretario jurídico que ellos, los alcaldes son funcionarios públicos por cuanto no pueden presentar este tipo de renuncias como madatarios, sino a titulo personal.

Los alcaldes de inmediato corrigieron el procedimiento y ahora es la Gobernación y el Ministerio del Interior, los entes que analizarán esta situaciónPor ahora se ha garantizado la seguridad en los siete municipios donde principalemente hace presencia guerrilleros de las FARC.

Para agregar, el alcalde de Ocaña, Luis Alfonso Diaz, en el pasado consejo Comunal del presidente Alvaro Uribe en la ciudad de Cúcuta manifestó a algunos medios de comunicación que por su cabeza, el grupo ilegal denominado "Aguilas Negras", está ofreciendo 50 millones de pesos. Díaz ha tenido que convivir en una guarnición militar y aumentar el número de escoltas para garantizar su seguridad. Entonces con el regreso de estas amenazas y con el bélico discurso del presidente de Uribe, ¿cuál es la garantia de la seguridad democrática?